Una de las recomendaciones que Banco Mediolanum hace de manera insistente a las familias es la de poner a trabajar los ahorros sin asumir riesgos innecesarios. Ya hemos visto en otras ocasiones que aprender a ahorrar supone aprovechar las oportunidades que pone a nuestra disposición el mercado y actuar en consecuencia.
La inversión de los ahorros en productos financieros es la mejor manera de obtener rentabilidad a través del ahorro familiar. Pero hay que elegir bien en qué, cómo y cuándo se invierte y, una vez tomada la decisión, saber con quién se hace. Debemos considerar varios aspectos fundamentales que determinarán si un producto financiero es el adecuado y poder elegir entre las diferentes opciones que se ofrecen como pueden ser los fondos de inversión.
1. La fiabilidad de la entidad
La primera de las reglas de oro a la hora de elegir un buen producto financiero es cerciorarnos de que la entidad que nos lo oferta sea fiable. Es decir, que cumpla con todas las normas, recomendaciones, exigencias y requisitos que imponen las leyes. Para ello hay que acudir al listado de entidades autorizadas por el Banco de España, en el que se recogen todas las entidades financieras registradas y auditadas por los organismos oficiales españoles.
2. La inflación y la fiscalidad
Las variables externas que influyen en el rendimiento de los ahorros, además de la evolución de los diferentes mercados, son la inflación y la fiscalidad. Hay que tener muy en cuenta estos dos factores a la hora de elegir los activos en los que invertimos. La subida de los precios y los impuestos son dos realidades que impactan de manera negativa en los ahorros, por lo que deben entrar en la ecuación a la hora de escoger bien el paquete de activos en el que vamos a invertir. Una buena elección servirá para que la rentabilidad de esas inversiones sea mayor que la suma de esas dos variables. Esto es: los rendimientos de las inversiones deben ser supriores al incremento del costo de la vida y a los impuestos que hay que pagar por las operaciones realizadas.
Si esto es así, podremos decir que la inversión ha sido rentable. La inflación depende de muchos factores por lo que la mejor manera de adelantarse al contexto económico, aunque nunca de manera totalmente exacta, es mirar el comportamiento del Índice de Precios al Consumo de los últimos años. También hay que tener claro cuáles son, cómo evolucionan y cómo nos afectan los impuestos que aparejan las operaciones financieras.
3. La seguridad
Una vez aclaradas las dudas, la variable principal que hace de un producto financiero una buena elección es la seguridad. En otras ocasiones hemos hablado de que las inversiones de renta variable (poner post renta variable) implican ciertos riesgos que pueden minimizarse con herramientas adecuadas, como la diversificación. Una de las características de los productos que oferta Banco Mediolanum es la enorme diversificación de sus paquetes de activos, que incluyen cientos de empresas, divisas y mercados. Con esta estrategia se logra reducir los riesgos de manera considerable.
4. La liquidez del producto
Por último, y no menos importante, hay que tener en cuenta la liquidez del producto, es decir, los plazos y condiciones para que la inversión se convierta en dinero líquido. Esto es una parte fundamental, ya que no es lo mismo un plan de pensiones pensado para completar la prestación pública tras la jubilación, que un fondo en el que el dinero puede ser retirado en cualquier momento. La rentabilidad y las condiciones de ambos productos no serán los mismos.
¿Aún tienes dudas? Para resolver ese problema están los 700 Consultores de Banca Personal de Banco Mediolanum. La red de asesores financieros está a disposición de las familias para responder cualquier pregunta y aclarar cualquier tipo de cuestión. Con una llamada de teléfono o un correo electrónico podrás recibir toda la información necesaria para dar el paso y empezar a hacer trabajar los ahorros. Los consultores bancarios de Banco Mediolanum cuentan con la formación y a experiencia necesaria para ofrecer el mejor servicio a las familias.